Steven Russell (Jim Carrey), es un padre de familia que acaba en prisión, y allí se enamora de Phillip Morris (Ewan Mcgregor), su compañero de celda. Sin embargo, llega el día en el que Morris es puesto en libertad, quedando Russell solo, algo que no podrá soportar, preparando todo tipo de elaborados planes para escapar, llegando incluso a fingir su propia muerte. Hasta cuatro veces logra burlar la seguridad con el objetivo de buscar a su amor. El destino o cómo queráis llamarlo quiso que Morris viviera en libertad, mientras que Russel se encontró con una condena de unos 100 años por culpa de sus fugas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario